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Como importar desde China a México, Impuestos y Requisitos

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Si somos un empresario en ciernes, o incluso uno ya consolidado, pero tenemos la intención de comerciar con productos traídos desde la República Popular China y no estamos seguros de cómo proceder, aquí aportamos nociones básicas y suficientes para que sepamos como importar de China de manera fácil, sencilla y sin gastar demás.

No necesitamos quebrarnos la cabeza o desistir en el intento, solo estar bien informado.

Tres actores básicos de una importación desde China

Para cualquier tipo de producto y sin importar la cantidad que vayamos a solicitar en nuestra importación, vamos a necesitar, al menos, de estos tres elementos:

– Un agente aduanal. Se trata de la persona que posee una patente autorizada por el Servicio de Administración Tributaria. Esta le permite promover por su cuenta la realización de movimientos de mercancías en los diversos regímenes aduaneros.

– Una comercializadora. Es una compañía que ofrece sus servicios de almacenaje, logística y distribución de nuestros productos -como una empresa de paquetería internacional, pero incluyendo la gestión de los procesos aduanales que implica importar- para que lleguen hasta la puerta de nuestro hogar o negocio.

– Un vendedor confiable. Hay múltiples páginas de compra y venta mundial en las que encontraremos fácilmente los productos requeridos y a buen precio, pero hay que considerar la fiabilidad de estos. Si no tenemos un vendedor seguro, es importante que nos basemos en la experiencia de otros compradores y que nuestra primera compra sea moderada.

Importar de China a México

Traer productos de China a México es muy sencillo, la verdadera cuestión es que depende de qué tipo sean y la cantidad a comprar. Ante todo, resulta necesario realizar un pedimento con firma electrónica donde se establezcan las características de nuestra importación.

Un pedimento es el documento que permitirá la liberación aduanal de nuestras mercancías estipulando las características de la importación y los métodos para su realización. Los hay de dos tipos que detallamos a continuación.

Pedimento simplificado

Consiste en que nuestra comercializadora realice una especie de paquete de importación colectivo donde pagamos únicamente la parte correspondiente a los impuestos que nos toca del total del pedido.

Este método es viable siempre y cuando nuestra compra no exceda los 2,500 dólares ni pese más de 100 kg. La única consideración en contra es que no podremos pedir una factura individual, ya que al ser un paquete de venta no se puede facturar parcialmente.

Pedimento formal

Este consiste en hacer un pedido exclusivo de nuestros productos, con lo que los gastos derivados de los impuestos corren totalmente a nuestro cargo.

Si el costo total de nuestros productos equivale a más de 2,500 dólares o pesa más de 100 kg, nos conviene que llegue directamente a México, puesto que el costo del pedimento simplificado es menor gracias a que la entrada se hace con una mediación vía Estados Unidos. Sin embargo, si nuestros productos pesan más, nos saldrá muy caro hacer dos paradas y, si son de mayor valor, habrá objeciones para que permitan su entrada en la Unión Americana.

Requisitos del SAT para recibir envíos desde China a México

Para poder realizar nuestras importaciones de China a México existe un Reglamento de la Ley Aduanera que es manejado por el Servicio de Administración Tributaria. Esta institución nos exige, entre otros requisitos:

– Estar inscrito en el Padrón de Importadores.

– Contar con un sistema de control automatizado para nuestros inventarios.

– Tener nuestro expediente de comercio exterior completo y al día.

– Si vamos a importar algún producto o material de uso regulado o especial, debemos estar en el Padrón de Importadores de Servicios Específicos.

– Estar al corriente con nuestras obligaciones fiscales.

De acuerdo con el mismo reglamento, deberemos redactar una Manifestación del Valor que garantice y detalle la compra de nuestras importaciones. Esta se obtiene con los documentos de la transacción que siguen:

– La factura de la compra.

– Los comprobantes de pago tanto de los productos como del transporte, los seguros y otros actores de la transacción.

– Los papeles que describan el transporte, sea una guía aérea o los documentos de embarque, así como los que indiquen el empaque.

– Los gastos incrementables, que son todos aquellos que están presentes antes de que el producto cruce la línea divisoria internacional.

Además de todo esto, debemos clasificar nuestro producto. Cada mercancía pertenece a una categoría única establecida por la aduana para el pago de impuestos.

Esta clasificación arancelaria puede requerir o no la cobertura del pago de impuestos por la entrada del producto, algunos impuestos ante el gobierno o, simplemente, el impuesto al valor agregado. Así que debemos verificar en qué categoría aduanal va encasillado el producto que vamos a importar.

Tipos de impuestos a productos provenientes de China en México

El 35 % de los bienes que se importan a México provienen de países con los que no hay acuerdos de libre comercio, a pesar de que contamos con 12 tratados de este tipo.

China forma parte de los diez principales proveedores de nuestro país. No obstante, no hay un trato de este tipo con dicha nación. Por eso, los productos venidos de este país asiático pagan aranceles que afectan directamente al consumidor.

El promedio de aranceles se encuentra entre el 2 y el 5 % de la compra en la mayoría de productos. En otros, en cambio, como la ropa de algodón, llegan a ascender hasta el 24 % mientras que en el calzado pueden alcanzar el 26 %. Por tanto, es importante realizar los cálculos adecuados antes de realizar una compra.

En este sentido, esto no es una limitación para importar de China a México. Los mismos datos confirman que los empresarios mexicanos siguen prefiriendo hacer tratos con los chinos. Es decir, la transacción conviene a pesar de los aranceles.

Algunas cuestiones para hacer envíos de China a México

Hay que recordar que los chinos son considerados «la gran fábrica del mundo», no solo en sentido literal por su manufactura, sino en sentido figurativo porque ellos han inventado el mundo en su forma de hacer negocios.

Así que podemos sentirnos seguros a la hora de realizar un trato y regatear, pero conviene tomar en cuenta las siguientes consideraciones:

1- Los comerciantes buscarán la forma de cerrar la venta a toda costa. Para obtener ventajas de ello, es importante que ofrezcamos una garantía de compra continua y un trato de fidelidad. De otra manera, si insistimos en bajar aún más el costo de los productos sin ofrecer nada a cambio, pueden darnos «gato por liebre»; es decir, productos de ínfima calidad. Así que debemos buscar una ventaja satisfactoria para ambas partes, una de mutua conveniencia.

2- Aprovechar las pruebas. Como muestra del punto anterior, muchos compradores están dispuestos a enviar pruebas de sus productos. Estas consisten en lotes pequeños a precio exclusivo. La cantidad y el costo será cuestión de cada comerciante.

3- Cuidar la comunicación con ellos. Para hacer un uso adecuado de los servicios de nuestra comercializadora y no tener errores que puedan producir gastos inesperados, necesitamos que el vendedor nos proporcione la mayor cantidad de datos sobre el producto.

Es necesario que brindemos a la agencia aduanal -por lo regular, un servicio de la comercializadora- información como el peso, el tamaño, la forma de envío o el costo. De eso depende la aplicación de impuestos a productos provenientes de China en México.

4- No olvidar solicitar un catálogo. Aunque las páginas de venta muestran los productos más vendidos o novedosos, lo cierto es que estos vendedores tienen tantos que será imposible tener una idea de los mejores productos de venta potencial si no requerimos un catálogo completo.

5- Bajo ninguna circunstancia dejar de cumplir ante el SAT. No está demás decir que si no estamos al día con la documentación y los requisitos solicitados por esta institución, no podremos llevar a cabo nuestras importaciones desde China de ninguna manera.

6- Proteger nuestra compra. Para ello es necesario que utilicemos procesadores de pago como Paypal, ya que ofrecen un seguimiento garantizado de la compra hasta la entrega y nos permiten reclamar fácilmente en caso de insatisfacción. No ocurre igual si utilizamos un servicio de manejo de efectivo como MoneyGram o depósitos bancarios.

7- Evitar los pedidos con carácter urgente. Si bien es cierto que a todos nos gusta que nuestras compras lleguen rápidamente, no hay por qué hacer pedidos de última hora.

En consecuencia, es importante tener control sobre las necesidades de nuestros clientes y sobre nuestros productos en bodega, para que el servicio de entrega -aunque en buena medida depende de peso y tamaño- sea el adecuado y no uno exprés, sin considerar variables que impliquen un costo elevado.

¡Listo para importar desde China con Pak2go!

Por fin, podemos dar nuestro primer paso para comerciar desde el país más poblado de la Tierra sin pasar por un neófito, sin que nos timen y sin gastar más que lo justo para que nuestro negocio tenga fluidez y nuestra labor de importación sea la de una empresa profesional desde el inicio.

Ya sabemos como importar de China, así que no necesitamos más que decidir comerciante y consolidar los servicios de una compañía como Pak2go que, más que una solución, representa un gran socio logístico para nuestra empresa (y tienen sucursal en Hong Kong). ¡Éxito!

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